A finales de 2009, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) registró que en Puebla 66 por ciento de las mujeres mayores de 12 años había tenido por lo menos un hijo; a cada poblana, en promedio le corresponden 3.7 hijos, cuando a nivel nacional este indicador es de 3.5 hijos.
Asimismo, de las mujeres que viven en Puebla y que tienen hijos, cuatro de cada 10 sólo llegan a tener uno o dos hijos en su vida, mientras que tres de cada 10 deciden tener hasta cuatro hijos, y una proporción similar es el de las mujeres que deciden tener cinco o más descendientes.
Entre los años 2003 y 2006, la entidad sumó 126 mil 269 nacimientos inscritos en el Registro Civil, y de estos 25 de cada 100 ocurrieron en la capital del estado, mientras que en Tehuacán sucedieron cuatro de cada 100 alumbramientos. 70 por ciento de las madres que registró a sus bebés son residentes de áreas urbanas, mientras que el 30 por ciento son de áreas rurales.
De cada 100 nacimientos ocurridos en la entidad, 17 fueron de mujeres que al momento del parto tenían entre 10 y 19 años de edad; 57 de cada 100 mujeres tenían entre 20 y 29 años de edad; 24 de cada 100 tenían entre 30 y 39 años de edad y dos de cada 100 mujeres tenían entre 40 y 49 años de edad. Cerca de la mitad de los alumbramientos fueron de mujeres que lo experimentaron por primera vez, de acuerdo con el Inegi.
Por grado de estudios, dos quintas partes de las mujeres que fueron madres aseguraron que tenían al menos un año de educación primaria; 30 por ciento contaba con algún año de instrucción secundaria y 13.6 por ciento con preparatoria. Sólo 9 por ciento aseguró tener estudios profesionales.13 por ciento carecían de escolaridad alguna.
El promedio de escolaridad a nivel nacional es de 7.6 años de estudio por cada mujer mayor de 12 años con un hijo vivo nacido; Puebla es la séptima entidad con el promedio más bajo del país y en primer lugar se encuentra el DF, con 9.1 años de estudio.
De cada 100 nacimientos, 35 correspondieron a madres casadas, 56 a mujeres que vivían en unión libre y nueve eran solteras.
En cuanto al lugar donde fue atendido el parto, 90 de cada 100 madres acudieron a un hospital o clínica y 10 alumbraron en su domicilio. De acuerdo con la información difundida por el organismo federal, sobre este aspecto en algunos municipios las proporciones contrastaron: en Eloxochitlán, en la Sierra Negra, 96 por ciento de las madres se atendió en su domicilio y 3.5 por ciento en un hospital o clínica; en Chiconcuautla, en la Sierra Norte, fueron 83 y 16.3 por ciento, y Chichiquila, al centro del estado, fueron 76 y 24 por ciento, respectivamente.
En cambio, la totalidad de progenitoras de Atzala, Coatepec, La Magdalena Tlatlauquitepec, San Juan Atzompa, San Miguel Ixitlán y Santa Catarina Tlaltempan se atendieron en hospitales o clínicas.
La mitad de madres
poblanas, violentadas
A lo largo de la relación marital o de pareja, la mitad de las madres poblanas ha enfrentado episodios de violencia por parte de sus esposos o parejas, “lo que muestra la magnitud de un problema que daña todos los aspectos del desarrollo de las mujeres y de su descendencia”, señaló el Inegi.
Por el tipo de violencia infligida, cinco de cada 10 madres fueron sometidas a violencia emocional, 29 por ciento a violencia económica, 26 por ciento a violencia física y 9.5 por ciento a violencia sexual.
De las mujeres que reportaron algún incidente violento con sus parejas, 34 por ciento declaró incidentes de sólo un tipo de violencia; 29 por ciento de dos tipos; 24 por ciento de tres y 11 por ciento manifestaron haber padecido los cuatro tipos de violencia: emocional, económica, física y sexual.
Entre las mujeres anteriormente unidas, la prevalencia de violencia fue considerablemente mayor, ya que 67 por ciento declaró haber experimentado incidentes violentos por parte de su ex esposo o ex pareja a lo largo de su vida en común. 62 por ciento vivió violencia emocional; 52 por ciento económica; 43 por ciento física y 31 por ciento sexual.
Muertes evitables
La información estadística agrega que durante el año 2008 en Puebla ocurrieron 63 defunciones de mujeres por causas relacionadas con el embarazo, parto y puerperio, la mayoría de ellas evitables; 28 de estas muertes se debieron a complicaciones del trabajo de parto y del parto; 11 a edema, proteinuaria y trastornos hipertensivos así cuatro a atención materna relacionada con el feto y tres a complicaciones principalmente relacionadas con el puerperio, es decir, con el periodo de 40 días posteriores al parto.
La tasa de incidencia del estado fue de 5.6 defunciones por cada 10 mil nacidos vivos; en el país correspondió a seis defunciones.
Trabajo
El Inegi asegura que al cuarto trimestre de 2009 había 672 mil 396 madres económicamente activas, quienes representaron 31 por ciento del total de mujeres 14 años y más en Puebla. La tasa de participación económica indica que 39 por ciento de las madres de 14 a 29 años de edad participó en la producción de bienes y la prestación de servicios destinados al mercado; lo mismo que 54 por ciento de las madres entre 30 y 49 años y 34.5 por ciento de las de 50 años.
Asimismo, de las mujeres que viven en Puebla y que tienen hijos, cuatro de cada 10 sólo llegan a tener uno o dos hijos en su vida, mientras que tres de cada 10 deciden tener hasta cuatro hijos, y una proporción similar es el de las mujeres que deciden tener cinco o más descendientes.
Entre los años 2003 y 2006, la entidad sumó 126 mil 269 nacimientos inscritos en el Registro Civil, y de estos 25 de cada 100 ocurrieron en la capital del estado, mientras que en Tehuacán sucedieron cuatro de cada 100 alumbramientos. 70 por ciento de las madres que registró a sus bebés son residentes de áreas urbanas, mientras que el 30 por ciento son de áreas rurales.
De cada 100 nacimientos ocurridos en la entidad, 17 fueron de mujeres que al momento del parto tenían entre 10 y 19 años de edad; 57 de cada 100 mujeres tenían entre 20 y 29 años de edad; 24 de cada 100 tenían entre 30 y 39 años de edad y dos de cada 100 mujeres tenían entre 40 y 49 años de edad. Cerca de la mitad de los alumbramientos fueron de mujeres que lo experimentaron por primera vez, de acuerdo con el Inegi.
Por grado de estudios, dos quintas partes de las mujeres que fueron madres aseguraron que tenían al menos un año de educación primaria; 30 por ciento contaba con algún año de instrucción secundaria y 13.6 por ciento con preparatoria. Sólo 9 por ciento aseguró tener estudios profesionales.13 por ciento carecían de escolaridad alguna.
El promedio de escolaridad a nivel nacional es de 7.6 años de estudio por cada mujer mayor de 12 años con un hijo vivo nacido; Puebla es la séptima entidad con el promedio más bajo del país y en primer lugar se encuentra el DF, con 9.1 años de estudio.
De cada 100 nacimientos, 35 correspondieron a madres casadas, 56 a mujeres que vivían en unión libre y nueve eran solteras.
En cuanto al lugar donde fue atendido el parto, 90 de cada 100 madres acudieron a un hospital o clínica y 10 alumbraron en su domicilio. De acuerdo con la información difundida por el organismo federal, sobre este aspecto en algunos municipios las proporciones contrastaron: en Eloxochitlán, en la Sierra Negra, 96 por ciento de las madres se atendió en su domicilio y 3.5 por ciento en un hospital o clínica; en Chiconcuautla, en la Sierra Norte, fueron 83 y 16.3 por ciento, y Chichiquila, al centro del estado, fueron 76 y 24 por ciento, respectivamente.
En cambio, la totalidad de progenitoras de Atzala, Coatepec, La Magdalena Tlatlauquitepec, San Juan Atzompa, San Miguel Ixitlán y Santa Catarina Tlaltempan se atendieron en hospitales o clínicas.
La mitad de madres
poblanas, violentadas
A lo largo de la relación marital o de pareja, la mitad de las madres poblanas ha enfrentado episodios de violencia por parte de sus esposos o parejas, “lo que muestra la magnitud de un problema que daña todos los aspectos del desarrollo de las mujeres y de su descendencia”, señaló el Inegi.
Por el tipo de violencia infligida, cinco de cada 10 madres fueron sometidas a violencia emocional, 29 por ciento a violencia económica, 26 por ciento a violencia física y 9.5 por ciento a violencia sexual.
De las mujeres que reportaron algún incidente violento con sus parejas, 34 por ciento declaró incidentes de sólo un tipo de violencia; 29 por ciento de dos tipos; 24 por ciento de tres y 11 por ciento manifestaron haber padecido los cuatro tipos de violencia: emocional, económica, física y sexual.
Entre las mujeres anteriormente unidas, la prevalencia de violencia fue considerablemente mayor, ya que 67 por ciento declaró haber experimentado incidentes violentos por parte de su ex esposo o ex pareja a lo largo de su vida en común. 62 por ciento vivió violencia emocional; 52 por ciento económica; 43 por ciento física y 31 por ciento sexual.
Muertes evitables
La información estadística agrega que durante el año 2008 en Puebla ocurrieron 63 defunciones de mujeres por causas relacionadas con el embarazo, parto y puerperio, la mayoría de ellas evitables; 28 de estas muertes se debieron a complicaciones del trabajo de parto y del parto; 11 a edema, proteinuaria y trastornos hipertensivos así cuatro a atención materna relacionada con el feto y tres a complicaciones principalmente relacionadas con el puerperio, es decir, con el periodo de 40 días posteriores al parto.
La tasa de incidencia del estado fue de 5.6 defunciones por cada 10 mil nacidos vivos; en el país correspondió a seis defunciones.
Trabajo
El Inegi asegura que al cuarto trimestre de 2009 había 672 mil 396 madres económicamente activas, quienes representaron 31 por ciento del total de mujeres 14 años y más en Puebla. La tasa de participación económica indica que 39 por ciento de las madres de 14 a 29 años de edad participó en la producción de bienes y la prestación de servicios destinados al mercado; lo mismo que 54 por ciento de las madres entre 30 y 49 años y 34.5 por ciento de las de 50 años.
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